En España, la economía late al ritmo de sus pequeñas y medianas empresas. El último Informe Emprende 2025 de Holded, elaborado junto a Toluna Corporate, confirma lo que muchos empresarios ya intuían: las pymes son el verdadero motor del país. Representan el 99,8% del tejido empresarial, generan el 72% del empleo privado y aportan el 65% del PIB empresarial. Sin embargo, siguen afrontando los mismos dilemas que hace una década: burocracia, costes crecientes y dificultades para acceder a financiación.
Una columna vertebral con músculo… pero con frenos estructurales
Según el informe, el 94,4% de las pymes españolas son microempresas con menos de diez empleados. Esta estructura explica buena parte de sus retos: menor capacidad para invertir en innovación, dependencia del crédito bancario y una digitalización que avanza, pero aún con desigualdades.
Más del 60% de los emprendedores afirma haber tenido problemas para acceder a financiación, y solo uno de cada cuatro considera adecuado el apoyo institucional. Aun así, el impulso tecnológico está cambiando el tablero: el 96% de los emprendedores utiliza ya alguna herramienta digital, desde software de gestión hasta redes sociales, según Holded.
Digitalización e inteligencia artificial: palancas del nuevo crecimiento
Las pequeñas empresas que han apostado por digitalizarse muestran mejores tasas de supervivencia y productividad. Tal y como recoge Holded, la facturación se multiplica por diez cuando la empresa supera los nueve empleados, y más del 40% de las pymes con más de diez trabajadores asegura ahorrar más de 20 horas mensuales gracias a herramientas digitales.
La inteligencia artificial comienza también a integrarse en procesos de contabilidad, marketing o atención al cliente. “La IA y la digitalización son las palancas que permitirán a las pymes competir con mayor agilidad y reducir costes”, señala el informe, en línea con las proyecciones de la Comisión Europea, que sitúan la productividad digital como clave para el crecimiento del PIB en la próxima década.
El perfil del nuevo emprendedor español
El ecosistema emprendedor en España es cada vez más diverso. Predomina la franja de edad entre 31 y 43 años (36 %), y aunque los hombres siguen siendo mayoría (56 %), el emprendimiento femenino se consolida.
Las principales motivaciones son la independencia financiera y la búsqueda de equilibrio entre vida y trabajo, especialmente entre los emprendedores de mediana edad. Entre los valores más representativos figuran el esfuerzo (46 %), la creatividad (34 %) y la capacidad para asumir riesgos (30 %).
“Los emprendedores españoles son resilientes y creativos, capaces de crecer incluso en entornos inciertos”, subraya el informe. De hecho, seis de cada diez empresarios perciben su sector en crecimiento, impulsado por la digitalización, la IA y la sostenibilidad.
Madrid lidera, pero el talento se reparte
Madrid concentra más del 20% del emprendimiento nacional, superando su peso demográfico. Le siguen Cataluña, Andalucía y la Comunidad Valenciana. Entre los sectores más dinámicos destacan las energías renovables, con un 28 % más de facturación respecto al año anterior, el e-commerce local, la salud digital y la logística urbana.
En palabras de los analistas de Holded, las empresas con mayor supervivencia son aquellas que combinan digitalización avanzada, proyección internacional e innovación continua, factores que también subraya el Banco de España en sus informes sobre productividad y competitividad.
Más innovación, menos burocracia
A pesar de su peso económico, solo el 18 % de las pymes españolas se considera innovadora, frente al 52 % de las grandes compañías, y su inversión media en innovación apenas alcanza el 1,2% de la facturación. En este punto, Holded coincide con los datos de Eurostat y la CEOE: el reto de la innovación sigue siendo cultural, no solo financiero.
La simplificación administrativa, el acceso ágil a fondos europeos y la cooperación público-privada son las tres palancas que, según los expertos, marcarán la competitividad de las pymes en el nuevo ciclo económico.
El Informe Emprende 2025 dibuja un panorama optimista, aunque no exento de desafíos. Las pymes españolas han demostrado que la innovación y la sostenibilidad no son patrimonio exclusivo de las grandes corporaciones. Con más digitalización, colaboración y visión internacional, están llamadas a liderar una nueva etapa de crecimiento inclusivo, más humano y más eficiente.







