¿Qué es el coste hundido? ¿Qué impacto tiene en la empresa?

Todas las decisiones que se adoptan, diariamente, en el seno de la empresa, tienen repercusión en la viabilidad económica de la misma. El coste hundido es concluyente para el éxito empresarial.

¿Qué es el coste hundido?

A la hora de poner en marcha iniciativas en la empresa, hay que tener en cuenta que las decisiones adoptadas incidirán de manera muy directa, tanto en el capital de la misma, como en su rentabilidad.

El compromiso que se adquiere, en ocasiones, deriva en lo que se denomina “coste hundido”, es decir, el coste o costes que no pueden ser recuperados. De una manera más vulgar, se trataría de aquellos costes en los que ha incurrido la empresa, y que han caído “en saco roto” puesto que son irrecuperables.

Estos costes son adoptados por la empresa, de manera independiente a si se realiza o no el plan o proyecto, por lo que su valoración debe ser muy exhaustiva.

Relación entre coste hundido y coste de oportunidad

Existe una estrecha relación entre coste hundido y coste de oportunidad. Como se explicaba en este post sobre coste de oportunidad, este concepto abarca los beneficios que debes desestimar por el hecho de elegir una alternativa, entre muchas posibles.

Encontramos varios ejemplos en el día a día de una empresa: cuando un empresario decide apostar por un nuevo producto, está desestimando realizar otras acciones, como podrían ser potenciar mediante promociones otros productos ya asentados en el mercado, o, simplemente, realizar un ahorro del dinero invertido en ese nuevo bien. Estamos, por tanto, ante un coste de oportunidad.

Sin embargo, el coste hundido cuenta con una singularidad: no es recuperable. Por tanto, esta alternativa siempre representará un elemento negativo en las cuentas de la pyme o micro pyme.

Ejemplo de coste hundido

La empresa X es un pequeño laboratorio especializado en el sector veterinario. Decide lanzar un nuevo producto veterinario, indicado para los contrarrestar los efectos de un determinado parásito. Para ello, pone en marcha una investigación, durante 10 meses, cuyo coste asciende a 10.000 euros en materiales y 20.000 euros en costes de personal.

Finalmente, es el momento de realizar las pruebas directamente en el animal al cuál va dirigido el fármaco veterinario. Contra todo pronóstico, las conclusiones del estudio demuestran que los efectos secundarios son muy elevados, y el producto no es eficaz contra el parásito, resultado totalmente inocua su administración. La empresa, por tanto, decide eliminar definitivamente el proyecto de su portfolio.

El coste hundido e irrecuperable de la empresa X asciende a 30.000 euros.

¿Es posible evitar el coste hundido?

La toma de decisiones es algo intrínseco a la empresa, ya se trate de una gran entidad, pyme o micro pyme. Todos los días, y en todos los departamentos, se han de valorar iniciativas. Estas son más o menos relevantes, pero siempre tendrán un reflejo en el futuro de la empresa, puesto que en ocasiones comprometen el uso de determinados recursos, tanto monetarios como de personal.

El impacto de las decisiones es fundamental para incrementar la productividad de la empresa. Por ello, se ha de establecer un plan estratégico que permitirá saber si se está abordando la alternativa mejor para el futuro de la empresa:

1- Establecer claramente el objetivo de la empresa.

2.-Identificar las posibilidades/ alternativas que se nos pueden plantear para llevarlo a cabo.

2.-Realizar un análisis pormenorizado (si es necesario mediante estudios ad hoc) de cada una de las opciones a tener en cuenta.

3.- Una vez definidas las diferentes opciones, realizar una valoración exhaustiva de los costes que ello puede suponer.

Para minimizar el impacto del coste hundido, hay que establecer, por tanto, una estrategia basada en la valoración de los recursos de los que disponen y un análisis muy exhaustivo de las opciones que se plantean.